Debido a su aislamiento geográfico, las estancias se veían obligadas a construir casas para su personal. Los empleados casados y con cargos de mayor responsabilidad tenían la posibilidad de vivir en terreno junto con su familia. Cuatro hijos de los esposos Fisher (ver Mabel Fisher en la foto) nacieron en esta estancia. [Más sobre esta familia, en inglés]